
La eutanasia, es decir, el acto deliberado de poner fin a la vida, aunque sea por voluntad propia o a petición de sus familiares, es contraria a la ética. Ello no impide respetar el deseo del paciente de dejar que el proceso natural de la muerte siga su curso en la fase terminal de su enfermedad. La Asociación Medica Mundial considera contraria a la ética y condena tanto el suicidio con ayuda médica como la eutanasia. En cambio recomienda los cuidados paliativos.
Luz Rocio Lazo Taipe
Nadie debe quitar la vida a otro ser humano. La vida es lo más valioso que la persona tiene, mientras uno se encuentra vivo puede vencer cualquier obstáculo incluso a la enfermedad y es mejor, si es que la muerte llega que se dé naturalmente.
Cuando se llega a conocer el significado de eutanasia se cree que es una buena solución para aliviar el dolor como; por ejemplo, en el caso de una señora que se encontraba cuadripléjica y solo podía mover el meñique de de su pie derecho, es entonces que su familia decide practicarle la eutanasia pensando que así ya no sufriría, pero luego de un tiempo la paciente empezó a escribir libros y actualmente es una escritora reconocida, tal vez si le hubieran aplicado la eutanasia nunca se hubiese descubierto la gran habilidad que tiene para escribir.
La mejor elección es dejar vivir y que esta siga su curso, como lo dice el director de ESSALUD: “no es ético practicar la eutanasia mas cuando el paciente no lo autoriza o no lo desea”. Por ello, la población debe informarse por cada decisión que toma, y no porque alguien sufra de una enfermedad y que se quiera “por desesperación” poner fin a este dolor.
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